La Ley C.U.R.A. establece una infraestructura sanitaria digital basada íntegramente en tecnología pública nacional, garantizando soberanía, seguridad y continuidad operativa en todo el país. Todo el sistema funciona sobre datacenters de alta disponibilidad ubicados exclusivamente en territorio argentino bajo la infraestructura de ARSAT, lo que asegura que la información clínica nunca sea alojada en servidores extranjeros ni en plataformas privadas que puedan comprometer la seguridad o el control estatal.
La arquitectura utiliza un modelo híbrido de nodos centrales y nodos jurisdiccionales, con redundancia geográfica, respaldo continuo, clústeres de alta disponibilidad y protocolos de contingencia. Esto asegura que el sistema siga funcionando incluso ante fallas regionales, caídas de conectividad o incidentes críticos. Cada componente del sistema está pensado para resistir interrupciones y garantizar disponibilidad permanente para guardias, emergencias, PAMI, ART y cualquier efector adherido.
C.U.R.A. incorpora un Modo de Contingencia que permite a los establecimientos operar localmente cuando no hay internet o se detectan fallas técnicas. Durante ese período, los datos se registran en un repositorio local encriptado y se sincronizan automáticamente con el nodo nacional apenas se restablece el servicio, sin pérdida de información ni riesgo para la atención clínica.
La infraestructura nacional se complementa con mecanismos de ciberseguridad avanzada, monitoreo continuo, detección temprana de incidentes y alertas automáticas. Los nodos centrales y provinciales están protegidos mediante múltiples capas de autenticación, firmas digitales, trazabilidad en tiempo real y políticas estrictas de control de acceso.
El diseño respeta la soberanía tecnológica: todo el almacenamiento, procesamiento, auditoría, trazabilidad y respaldo se realiza dentro del país. ARSAT garantiza la continuidad operativa, la contingencia ante desastres y el resguardo geográfico disperso para evitar puntos únicos de fallo. El sistema está preparado para escalabilidad nacional e internacional, permitiendo incorporar nuevos módulos, integraciones y tecnologías sin comprometer la estabilidad ni la seguridad.
En conjunto, la infraestructura nacional de C.U.R.A. crea un entorno robusto, seguro y resiliente, capaz de sostener el sistema sanitario del país con estándares de clase mundial y garantizando disponibilidad ininterrumpida para millones de personas.